FX Interactive se declara insolvente
La mítica compañía de videojuegos FX Interactive ha sucumbido después de unos años con bajos ingresos. La responsable de juegos como PC Fútbol o Imperium ha tenido que declararse insolvente. La situación venía de largo. En 2015 la compañía tenía unos ingresos de 12 millones de euros mucho mayores que el millón que ingresaban hace 3 años. Unas pérdidas que año tras año se arrastraban hasta hacer imposible la continuidad de la empresa.
Tanto ha sido la caída de esta empresa que ya salieron a la luz casos de impagos. Como la de este hombre al que la compañía le debe ya la friolera cantidad de 50.000 euros. Su política de mantener precios bajos junto con la aparición de plataformas digitales, como puede ser Steam, parece ser alguno de los motivos de la decadencia de esta empresa.
Recordemos que esta compañía dio un giro a su empresa pasando de ser desarrolladores a una distribuidora. Sus juegos se caracterizaban por venir siempre traducidos y por tener unos precios bajos. Casi todos los juegos de FX Interactive podían adquirirse por 9,95€ menos algunos llamados premium por 19,95€. Su popularidad también aumentó cuando cerraron un acuerdo con «El Mundo» para vender sus juegos bajo la colección «Los mejores videojuegos del mundo«.
Esta noticia me entristece ya que, FX Interactive, me ha dado horas de diversión con sus juegos. Empezando por Tzar y pasando aventuras gráficas como Hollywood Monsters o Runaway. Y sobre todo, al juego de FX que más horas le eché en PC, Sacred. Mención especial al primer shooter multijugador que me enganchó sobremanera: Torrente Online.
Falta por saber que pasará con los juegos adquiridos en su plataforma y como afectará a los usuarios de la misma. Esperemos que las cosas se resuelvan lo mejor posible para una empresa que ha dado mucho a los videojuegos en nuestro país.
Con un mando entre las manos desde el 92. Crecí con un dragón morado, un erizo azul y un fontanero que no se dedica a la fontanería. De mayor intenté comerme la tarta... pero era mentira. Retarme a un duelo de insultos puede ser una decisión mortal. Y por si fuera poco, dirijo una isla de monos... por lo que de mayor ¡quiero ser un gran pirata!.