El vídeo que lanzó la Casa Blanca ha dado mucho que hablar, sobretodo en el sector afectado, el de los videojuegos. En muchos casos se ha expuesto el doble rasero que tenía el vídeo, sacando de contexto el contenido, para buscar el lado más violento de las escenas elegidas. Hoy, la organización Games for Change, ha mostrado otro vídeo donde han querido mostrar que ni todos los videojuegos son violentos, ni todos buscan la exposición explicita de la violencia.
En el vídeo podemos ver imágenes de juegos donde no hay un componente violento como puede ser: Life is Strange, Azbû, Ori, Little Big Planet o Journey pero también se han destacado juegos como Breath of the Wild donde si existe ese componente violento pero no se enfocan directamente en él: lo utilizan como medio no como fin. El formato del vídeo es el mismo usado por la Casa Blanca en su momento mostrando escenas sin violencia para mostrar la cara opuesta a la mostrada por el otro vídeo.
Sin ir más lejos Randy Pitchford, Director ejecutivo de Gearbox Software, dijo:
Tus propios juegos pueden ser montados con esa actitud forzados con la misma intención de destacar las representaciones de violencia y socavar el arte y la expresión. Esas representaciones a veces son necesarias si el arte quiere ser útil para nuestra especie. ¿No has leído a Shakespeare? ¿O la Biblia?
Otros como Rami Ismail de Vlambeer destacan lo irónico que es lanzar un vídeo con escenas violentas sin una advertencia ESRB o PEGI en el inicio para avisar al espectador del contenido que va a ver
I can't believe the White House has such a violent compilation of game footage from age-restricted games on their YouTube channel without the industry-standard PEGI/ESRB warnings for content in front of it. pic.twitter.com/aal4rh9dcU
— Rami Ismail (@tha_rami) March 9, 2018
Esta cruzada sólo acaba de empezar y veremos los movimientos por parte del gobierno de los Estados Unidos para abordar este tema que tanto les preocupa.
Con un mando entre las manos desde el 92. Crecí con un dragón morado, un erizo azul y un fontanero que no se dedica a la fontanería. De mayor intenté comerme la tarta... pero era mentira. Retarme a un duelo de insultos puede ser una decisión mortal. Y por si fuera poco, dirijo una isla de monos... por lo que de mayor ¡quiero ser un gran pirata!.