Una aventura con ganas de ser original y causar sensación en el jugador, que no dejará indifirente a ninguno de los que lleguen a conocer a esta intrépida guardiana de las estaciones.
Un comienzo de «Princesa Disney»
El 1 de Septiembre entrando ya en esta época de final de verano, que a su vez coincide con este final de generación; nos llega de la mano de Modus Games la colaboración entre estas dos desarrolladoras belgas, Exiin y Fishing Cactus. El resultado es un increíble viaje a lo largo del mundo de Valdi que nos pondrá en la piel de Ary, una pedazo de protagonista principal de la que hablaremos más adelante.
La historia comienza presentándonos a la familia de Ary, rota tras la desaparición de Flynn, su hermano mayor. Vemos a un padre inválido y destrozado por el dolor, una madre que parece ser quien tira del carro en la casa después de la tragedia, y una chiquilla (Ary) que busca desesperadamente servirles de ayuda. El padre de Ary es un hombre importante en la región, ya que es uno de los cuatro guardianes de las estaciones, el del Invierno concretamente. Su hijo Kelly era su aprendiz y encargado de sucederle en sus funciones. Tras esto, nos muestran el pueblo donde viven y como del cielo caen una serie de cristales que cambian por completo el clima en el que viven, alterando las estaciones y la paz del reino.
Esto agrava aún más la situación ya que su padre no puede acudir a arreglar el desastre, y tampoco está Flynn para sustituirle. Por esto y ante la negativa de su familia, Ary decide desafiar su destino y ocupar el puesto de guardiana; robando el cristal invernal de su padre, cortándose el pelo y vistiéndose con la ropa de su hermano para poner rumbo al consejo de guardianes. ¿Veis alguna similitud? Según lo jugaba me recordaba algo a Mulán, aunque de distinta forma. Lo que tengo claro es que este comienzo de historia podría encajar perfectamente con una producción animada de esas que llenan los cines y ganan miles de millones. En resumen, muy bien presentada la trama.
Ary, «genio y figura»
Y sí, la trama está muy bien presentada. Pero Ary lo está mejor aún. Desde los primeros momentos del juego vemos como derrocha salero y arte para dar y tomar. Su personalidad es arrolladora, enérgica, desafiante e inconformista. Tiene duende como dicen por aquí, es una entre un millón. No sabría que adjetivo la definiría mejor, porque siempre es una chica risueña y alegre en cada encuentro con algún NPC; pero a la vez también es intrépida y valiente en cada tarea que se le pone por delante.
Los desarrolladores consiguen que luzca durante todo el juego, no perdiendo chispa durante ningún instante. Todo gira en torno a ella y en cada conversación podemos ver como brilla su personalidad por delante de cualquier otro personaje. Es una buena construcción de protagonista, también sencilla y sin demasiadas florituras, pero muestra lo que tiene que mostrar y consigue el efecto deseado en el jugador que se pone a los mandos de Ary.
A pesar de tener una personalidad bastante fuerte y bien definida desde un inicio, también vemos cambios en ella. Durante nuestras primeras misiones vemos como las personas adultas de Valdi tratan a Ary como a una niña pequeña, indefensa y más un estorbo que una ayuda. Sin embargo, esto cambia una vez que comenzamos a derrotar enemigos y ayudar a los ciudadanos. Vemos como estos la admiran, y Ary pasa de ser un personaje que intenta demostrar su valía en cada conversación, a una chica humilde que busca la manera de poder ayudar a su pueblo.
Innovando en lo jugable
El control es bueno y fluido, además Ary da unos saltos que flipas y ya ni te cuento cuando consigues el doble salto. Se le saca más partido sobre todo en escenarios abiertos y mazmorras que en ciudades. De vez en cuando te encontrarás pequeños puzzles o misiones secundarias en tu camino, que hace un poco más llevadero el desplazamiento entre puntos de mayor interés. Estos por lo general son sencillos y no necesitan de gran habilidad para completarlos; aunque cuanto más avances y más poderes estacionales consigas mayor será la dificultad, ya que tendrás que realizar combinaciones entre distintos poderes.
El combate empieza bastante básico: ataca, esquiva rodando o saltando y bloquea para hacer parries. Es bastante sencillito incluso en díficil. Además ni las animaciones ni los enemigos destacan demasiado, ni llegan a la altura de otros aspectos del juego. Una vez que avanzas se vuelve más divertido, sobre todo contra jefes, ya que tienes que hacer un buen uso de los poderes elementales dándole algo más de vistosidad y gracia a las batallas.
Hemos mencionado que el uso de los poderes elementales mejora tanto la diversión en puzzles y secundarios como los combates. Y este es el punto que marca la diferencia en su jugabilidad respecto a otros títulos que danzan con un género parecido. No es que sea algo increible y que vaya a marcar una tendencia, pero si que le da un toque personal que resulta fresco y gratificante. Además de hilar esto con la misma historia que nos van contando, por lo que no resulta como un nuevo poder y ya está; sino que se entiende como algo propio en consonancia con el mundo de Valdi. Y sobre todo, son muy sencillas y rápidas de usar, no tienes que equipar nada. Simplemente con los botones de dirección puedes manejar todas, lo que hará que no abusemos de la mejor de ellas; algo que pasa en otros juegos cuando tienes que andar entrando y saliendo del menú para cambiar poderes.
Técnicamente, «mejor fuera que dentro»
La historia comienza en casa de Ary, en el pueblo de Yula. Y tanto en ese interior como en el pueblo podemos observar que técnicamente no destaca demasiado, ni incluso dentro de los juegos indies. Algún pequeño detalle con la cámara dentro de lugares pequeños, o ciertos efectos climáticos como la nieve no acaban de verse del todo bien. Esto cambia completamente cuando salimos al exterior, donde se observa más armonía entre los elementos que componen el paisaje; así como el uso de una paleta de colores viva favorece a que se vea bastante bien.
El diseño de personajes a pesar de ser sencillo, es resultón y homogéneo en todos los habitantes. Esto es de agradecer, y yo lo prefiero a tener un protagonista muy recargado en cuanto a detalles que contrasta con NPCs que parecen sacados de juegos de generaciones anteriores. En cuanto a la banda sonora, mantiene ese carácter lábil y sencillo que observamos en otros aspectos del título, por lo que no desentona y acompaña bastante al juego en general. Además cuenta con tonos muy diferentes en función de la localización y clima, algo que me gusta y me recuerda a los diferentes que había en los mundos de Spyro 2.
¿Una oportunidad de futuro?
El trailer de este juego me llamó la atención porque uno de los títulos que más espero es Kena: Bridge of Spirits, y al ver su estética y una protagonista parecida tengo que decir que me entró rápidamente por el ojo. Además me resultó muy curioso el ver como podías manejar el clima, y cambiar los posibles caminos a recorrer. Incluso esa estética natural y de aventuras me resultó bastante atractiva. Y realmente, el resultado final ha conseguido llenar esas expectativas.
Me quedo sobre todo con la protagonista, de verdad, es genial. Y si tengo que añadir algo, es el potencial que le veo a este juego y a este mundo. Y también pensar ¿que sería de este juego con mayor posibilidades económicas? Habrá que estar pendiente de los movimientos en los próximos años de estas dos desarrolladoras. Sin más, Ary and the Secret of Seasons: una grata sorpresa para ir haciendo tiempo en espera de la nueva generación.