El día de ayer amanecía tranquilo y apacible en las oficinas de Blizzard. Nadie esperaba que, horas más tardes, una parte (pequeña pero notoria) de la comunidad de uno de sus juegos más populares, como es Overwatch, se les iban a echar encima. Y vosotros diréis, ¿van a cerrar los servidores? ¿van a cobrar por personajes que ya lanzaron? ¿van a banear por estornudar a pleno pulmón en medio de una partida con el micro abierto?. No, amigos míos. El problema era que, desde la cuenta oficial de Michael Chu el guionista del juego, se confirmaba que Soldado 76 es gay. Esto es algo que ya se dejo entrever en su momento y que, con la salida del comic «Bastet» que cuenta la historia de la ex-francotiradora Ana, ha vuelto a estar en primera plana. Por si no había quedado claro, Michael Chu, envío un tweet confirmando lo que el propio cómic ya dejaba ver para, de alguna manera, hacerlo más oficial aún si cabe.
Este simple mensaje fue suficiente para que una parte de la comunidad de Overwatch expresara su malestar con este hecho. Como leéis: malestar porque su personaje favorito es gay. He leído de todo desde «no tenéis vergüenza, os habéis cargado el personaje. No es realista.» pasando por «estamos hartos de que todo tenga que ser homosexual por fuerza» hasta pedir la devolución del dinero en cuentas que tienen más de 300 horas jugadas. Que yo sepa conocer este dato del personaje no va a cambiar la forma en la que se utiliza su definitiva, cosa que podría cargarse el personaje. Que yo sepa de 25 personajes que tiene actualmente Overwatch sólo hay 2 actualmente reconocidos que son abiertamente homosexuales, un 8% del plantel. Y por favor, decís que no es nada realista que Soldado 76 sea gay, vale; entonces que Winston sea un mono inteligente o que Widowmaker sea morada es la normal general en nuestro día a día ¿verdad?.
A la segunda tampoco va la vencida
Lo peor de todo esto es que, leyendo está «polémica» me he acordado de cuando hicieron lo propio con Tracer. De verdad que no entiendo la cabeza de más de uno que se ve atacado por la sexualidad de un personaje ficticio. En el caso de Tracer me llegó a parecer enfermizo con lo que se podía leer de algunas personas dejando entrever que, al revelar que era lesbiana, les habían quitado una especie de hipotética oportunidad con el personaje. Algo como: sí se que en la realidad no tuviese oportunidad con ella, por su orientación sexual, deja de tener un encanto como personaje ficticio. Entiendo que la sexualización de los personajes, sea de hombres o de mujeres, está presente para atraer la atención de según que público pero no puedo entender como se puede llevar a un plano tan personal y decidir si eliges a un personaje o no por su orientación sexual. Debería primar la utilidad o las habilidades en la partida antes que cosas que son puramente de un trasfondo, como es la historia del personaje, o una skin. Lo que asusta de esto es que, si piensan así sobre un personaje inventado, ¿cómo pensarán en la vida real?
También he leído críticas hacía Blizzard en un movimiento oportunista por ganarse el favor y la aprobación un movimiento y que, por eso el lore de Overwatch, lo están cambiando según les conviene. Overwatch no iba a tener un trasfondo ni una historia que contar. Fue la insistencia de la comunidad y la curiosidad por saber más de sus personajes por lo que empezaron a desarrollarla. La forma en la que van soltando datos de los personajes está estudiada y pensada para mantener el interés constante de la comunidad y, además, para alimentarlo de contenido regularmente. Es decir, que si Soldado 76 tenía un transfondo, una orientación sexual o le falta el dedo meñique del pie derecho porque se lo tuvieron que amputar al darse con la esquina del sofá estaba así desde el principio. Soldado 76 siempre ha sido gay; sólo que no conocíamos ese dato. Y hasta ahora: ¿ha pasado algo?. Pues eso.
Lo siento pero no puedo dejar de pensar en lo absurdo que es dejar de usar un personaje o devolver un juego por algo que ni siquiera afecta al desarrollo del mismo. Y aún más cuando lo haces por rasgo del personaje que debería darte igual. Ver estas reacciones me hace acordarme de las personas que no querían comprar Battlefield V porque había mujeres e incluso de polémicas muy parecidas en juegos como League of Legends con uno de sus personajes: Varus. Todo esto, que debería ser algo normal y no debería importar para jugar, son movimientos que hacen las compañías para visibilizar y ayudar a normalizar una situación que, visto lo visto, todavía no está del todo resuelta. Y me da lo mismo que Blizzard, Riot Games o EA lo hagan porque saben que se creará polémica en su intento por visibilizar y normalizar como herramienta de difusión porque el problema es que no debería haber polémica.
Deberíamos dejar de mirar tanto y darle tanta vuelta a todo porque en definitiva son videojuegos. Mundos irreales con personajes e historias inventadas para hacernos disfrutar y pasar un buen rato. Da igual que el personaje sea, alto, bajo, asmático, daltónico, con tres brazos o con la piel azul, lo que realmente importa es disfrutar la historia que nos quieren trasmitir o coger el mando y pasar un rato divertido. Todo lo demás, sobra.
Con un mando entre las manos desde el 92. Crecí con un dragón morado, un erizo azul y un fontanero que no se dedica a la fontanería. De mayor intenté comerme la tarta... pero era mentira. Retarme a un duelo de insultos puede ser una decisión mortal. Y por si fuera poco, dirijo una isla de monos... por lo que de mayor ¡quiero ser un gran pirata!.