La realidad virtual se está convirtiendo en un gigante (nunca mejor dicho) que va evolucionando con el paso del tiempo. Hace unos años no nos podíamos imaginar que, con un visor de RV y unos mandos, podríamos disparar con nuestras propias manos a una oleada de robots que quieren eliminarnos; y sin embargo, aquí estamos. Atrás van quedando las experiencias de juego totalmente arcades para dejar paso a juegos con profundidad y centrados en las mecánicas para trasmitirnos una historia, algo que agradezco sobremanera.
Ghost Giant es uno de esos juegos que quiere dar un golpe sobre la mesa y demostrar que se puede contar una historia en realidad virtual de un modo llamativo y atractivo para el jugador. Todo ello forrado con un gran apartado artístico y con una banda sonora que nos cogerá de la mano y nos llevará por todos sus escenarios. Comenzamos.
Ghost Giant
La historia del niño con problemas y su amigo irreal lleva entre nosotros más tiempo del que pensamos. El gigante de hierro o Casper son dos de las historias que se me vienen así a bote pronto y que Ghost Giant ha querido rescatar y homenajear de alguna manera. En este caso estaremos al otro lado ya que, nosotros mismos, seremos el gigante que tendrá que ayudar a nuestro nuevo amigo, un gato llamado Louis. Él sera el único que puede vernos y, aunque seamos totalmente etéreos, podremos ayudarle interactuando con el entorno y todos los objetos que se encuentran en él.
El juego en general está adaptado para todos los públicos y la historia no salva de esto. La historia está simplificada los suficiente para que un niño pueda seguirla pero tiene un mensaje que sólo un adulto podrá entender. Ghost Giant nos habla de amistad, superación y de unión pero también de decepción, soledad y depresión temas que son tratados con la máxima delicadeza y que iremos viendo identificados de formas muy claras en varias escenas y personajes.
Soy un fantasma y cojo cosas
La magia de este juego reside, a parte de en su narrativa, en su forma de crear un universo de fantasía en el que nos sintamos cómodos en todo momento. La combinación de cartón y madera junto con un aspecto de marionetas para los personajes hace que el universo creado para el juego sea increíblemente bonito de admirar. A esto hay que añadirle un gameplay que está a medio camino entre el walking simulator y la aventura gráfica una combinación que encaja perfectamente con el apartado artístico.
Al igual que la historia, las mecánicas están pensadas para todos los públicos, por lo que la dificultad de los puzles no será demasiado exigente limitándose a encontrar objetos en el escenario y tratar de encajarlos en algún sitio para poder continuar. Tendremos que interactuar con todo lo que tenemos a nuestro alrededor de una forma original: con un botón agarraremos las cosas y con otro distinto tendremos un dedo para empujar o señalar… eso sí, menos cuando haya momentos narrativos.
Entiendo que, para buscar la atención del jugador, restrinjan todo lo que no sea la historia impidiéndote interactuar con los objetos y restringiendo el campo de visión haciendo el juego de noche. El problema es que en ocasiones el juego tendrá historia durante varios minutos lo que, personalmente, me saca de la inmersión al tener que estar de pie como un pasmarote sin hacer nada más que mirar la escena.
El apartado sonoro es también digno de mención ya que, junto con el apartado estético del juego, ayuda a crear ese ecosistema que nos atrae y nos sumerge en la historia. También tengo que destacar las voces que incluye el juego aunque sólo estén en inglés. Eso si el juego cuenta una muy buena traducir que podremos leer si el inglés no lo llevamos del todo bien.
Cuando me digan que un juego de realidad no puede tener un hilo argumental ni una narrativa, sin duda alguna, les enseñaré Ghost Giant. No solo es un juego estéticamente bonito si no que va más allá tratando de trasmitirnos un mensaje de la manera más inocente y velada posible. Mecánicamente está recortado para encajarlo a las necesidades pero tiene detalles únicos que lo diferencian dentro de la narrativa y dentro de la propia realidad virtual. Sin duda un paso muy valiente dentro de la realidad virtual ofreciéndonos una experiencia alejada del típico arcade de RV.
Nota: Este análisis se ha realizado en una PlayStation 4 Pro, con los dispositivo PlayStation VR + PS Move con una copia cedida por PlayStation España.
Con un mando entre las manos desde el 92. Crecí con un dragón morado, un erizo azul y un fontanero que no se dedica a la fontanería. De mayor intenté comerme la tarta... pero era mentira. Retarme a un duelo de insultos puede ser una decisión mortal. Y por si fuera poco, dirijo una isla de monos... por lo que de mayor ¡quiero ser un gran pirata!.
