Resident Evil 3 (2020) es una experiencia vibrante, intensa y satisfactoria. Mucho se ha comentado en análisis y comentarios generales dentro de la comunidad acerca de la duración y recortes del programa, pero puedo asegurar a nuestros lectores que, una vez te pones a los mandos y te dejas llevar, la experiencia final está a la altura de las mejores entregas de la saga.
¿REMAKE O REIMAGINACIÓN?
Esta entrega como remake conservador o respetuoso con el original no vale nada. No es un remake al uso, teniendo nada o poco que ver con Resident Evil (2002) o incluso con las sensaciones de remake con tintes de reimaginación que tuvo Resident Evil 2 (2019). Resident Evil 3 (2020) toma con muchísima libertad las bases del juego de 1999 para construir un episodio independiente. Por lo tanto, puedo asegurar que esta entrega sensu lato es un remake pero no en sentido estricto. Es, tal y como aseguraron sus productores, una profunda reimaginación. Quien tenga la mente abierta, disfrutará de este juego; quien no la tenga…, bueno, quizás este juego no sea para esa persona. De cualquier modo, yo no soy quién para hacer afirmaciones tan rotundas, pues existen casos de grandes admiradores de la obra original que también han disfrutado de esta reimaginación, pero no es lo habitual.
RESIDENT EVIL, EL TERCERO DE SU NOMBRE, APODADO “EL BREVE”
La duración de esta tercera entrega es sumamente escasa si el jugador solo quiere experimentar una sola vuelta. La amortización del producto para muchos usuarios es vital a la hora de adquirir un juego, pues el dinero es un medio de pago que cuesta obtener para el grueso de la población. Por lo tanto, lector, si eres de ese perfil que no va a exprimir Resident Evil 3 (2020) al máximo, no te recomiendo que adquieras este producto a precio completo.
Con respecto al fan de mente abierta, la situación es más sencilla: observando cómo ha quedado el juego en su versión final, la inversión está plenamente justificada. Además de una primera vuelta que ronda las 6-7 horas disfrutando, hay que sumar el obtener todos los méritos del juego, los cuales, a su vez, otorgan una serie de puntos para gastar en una tienda, la cual ofrece jugosos y divertidos extras para mejorar nuestros tiempos, obtener los rangos “S” en las diversas dificultades (hay 5: Asistido, Estándar, Hardcore, Pesadilla e Infierno) o sencillamente para darle otro “sabor” a las sucesivas vueltas gracias a las armas infinitas, potenciadores, etc.
En total, sacarle todo el rendimiento a Resident Evil 3 (2020) puede llevarte unas 30 ó 35 horas, y os aseguro que cada segundo lo vais a disfrutar porque el juego no tiene nada de relleno. Todo lo jugado se traduce en puro y simple disfrute.
También son breves las persecuciones de Némesis a lo largo del juego, nada que ver con la organicidad que transmitía un perseguidor como Mr. X. En estas nuevas iteraciones de lo clásicos de 1998 y 1999, se han invertido los roles: ahora Mr. X es Némesis y Némesis es Mr. X en tanto en cuanto sus apariciones son un amasijo de scripts anecdóticos, quedando los combates contra el asesino de S.T.A.R.S. reducidos a meras arenas de combate. Es una decisión de diseño inteligente, pues viendo las capacidades físicas y de combate de Némesis, el haber tenido a esta criatura todo el rato detrás habría repercutido en una experiencia muchísimo menos satisfactoria.
UNA EXPERIENCIA MARAVILLOSA
Reducir esta obra a su (muy) relativa corta duración o a su falta de fidelidad a la obra original va a provocar que muchos jugadores, mal influenciados por terceros, no disfruten de una de las mejores entregas de esta saga. Es así de simple. Este juego es una súper producción y que posee un valor propio, y no precisamente bajo, como juego independiente. Su conexión, no obstante, con Resident Evil 2 (2019) es total, pero, he de insistir, Resident Evil 3 (2020) se mantiene como proyecto con enjundia.
Hay que añadir que el concepto survival horror está presente en todo su esplendor, que hay backtracking y exploración, que los niveles están exquisitamente diseñados, y que es la única entrega de la saga que ha sabido mezclar buenas dosis de acción con exploración lenta, pausada, en escenarios con un ambiente tenso y denso. La casi falta de puzles o de acertijos no se hace flagrante, más si tenemos en cuenta que vacas sagradas como Resident Evil 2 (1998) tampoco contaba con ningún acertijo en condiciones.
Quiero dejar claro que esta nueva iteración de Resident Evil 3 ha sido objeto de críticas injustas e inmisericordes, elaboradas por personas que quizás no han terminado de valorar el juego como lo que realmente es y sí como lo que quieren que sea. Craso error. Ya lo dije con respecto a Resident Evil 2 (2019): no es el remake de mis sueños. Ni falta que le hace.
Un oso (jacoso) varado en una isla de monos.
[…] La gran aclamada saga de terror de CAPCOM publicó su primera entrega en 1996. Este nuevo videojuego asentaría definitivamente las bases del Survival Horror e incluso sería el primero en acuñar el término. Esta saga ha generado un éxito tan grande que son innumerables el número de secuelas, juegos secundarios y remakes que la desarrolladora ha producido. Inicialmente surgió como una aventura de terror, aunque posteriormente alguna de sus entregas se centrarían más en la acción. Recientemente analizamos su última entrega en este artículo. […]