A través del diario Belga De Standaard (y a la inestimable ayuda de Google Translate) hemos podido saber que, la Comisión de Juego, ha lanzado sus conclusiones sobre las famosas cajas de botín. Para hacer el estudio se han cogido cuatro títulos que incluyen estas cajas: Overwatch, Counter Strike: Global Offensive, FIFA 18 y Star Wars Battlefront 2 concluyendo que, los tres primeros, contienen «juego de azar encubiertos». Hay que aclarar que Star Wars Battlefront 2 se salva de entrar en este estudio por retirar a tiempo el sistema de microtransacciones que venía implementado con la primera versión de este juego. De haberlas mantenido, hubiesen entrado en el estudio al igual que los otros tres juegos.
El informe habla de una situación en la que la falta de regulación de estas cajas contrasta fuertemente con el sector de juego regulado para adultos haciendo que, menores de edad, compren cajas de botín como si de una apuesta se tratase. También se habla de la vulneración del sistema por edades ya que, en juegos con clasificación PEGI +3, se encuentran este tipo de cajas, incitando a menores a entrar en la dinámica de los juegos de azar.
Una de las cosas que podemos destacar de este análisis son los cuatro puntos que han establecido para considerar cuando un juego o una mecánica es realmente de azar: tiene que ser un juego, debe general cierto nivel de compromiso, debe conducir a la ganancia o la pérdida del jugador y debe estar vinculado por completo al azar y no a la habilidad. Usando estos parámetros vemos como, independientemente de las posibles ventajas que nos puedan ofrecer estas recompensas, en todos los juegos se cumplen. Por tanto para este organismo es una forma de tentar a los usuarios pasándose por alto todas las normas de protección contra los juegos de azar.
Esta comisión también destaca el uso de celebridades para atraer a potenciales usuarios a la compra de este tipo de cajas algo que es bastante polémico también porque normaliza una situación entre niños y jóvenes como son las apuestas y los juegos de azar.
Aunque este estudio haya llegado a estas conclusiones, el ministro Koen Green, quiere primero sentarse con las compañías y encontrar una solución. En caso de no encontrarlas se podrían aplicar sanciones de hasta 800.000 euros y penas de cinco años de prisión. También el ministro Koen Green dice que el hecho de que, tras estos juegos estén compañías tan grandes como Blizzard, la FIFA o Disney y no hayan intervenido, es también un hecho a destacar. Lo que no sabe Green es que son estas mismas compañías las que, desde hace muchos años, apoyan un sistema que les viene como anillo al dedo para ingresar cada año millones de euros; que ahora estén en el ojo del huracán tras varias polémicas no significa que desde hace años esto sucediese.
En definitiva esto es un paso más hacía la regulación de este controvertido sistema que cada vez más y más juegos integran. La comunidad ya se ha alzado muchas veces en contra de este sistema y, como ocurrió con Star Wars Battlefront 2 en su momento, se consiguió evitar un sistema que beneficiaba a las compras in-game antes que a la habilidad del propio jugador. Ahora sólo queda esperar a que no sea sólo Bélgica la que se pronuncie.
Con un mando entre las manos desde el 92. Crecí con un dragón morado, un erizo azul y un fontanero que no se dedica a la fontanería. De mayor intenté comerme la tarta... pero era mentira. Retarme a un duelo de insultos puede ser una decisión mortal. Y por si fuera poco, dirijo una isla de monos... por lo que de mayor ¡quiero ser un gran pirata!.
